Una mañana en el Palau ( Barça vs Unicaja )

El Winterthur FC Barcelona dio un paso muy importante de cara a asegurar la tercera plaza de la Liga ACB después de derrotar con contundencia al Unicaja de Málaga por un claro 68-51. Con cierto regusto a revancha tras ser apeados de la Euroliga por los de Sergio Scariolo, el cuadro azulgrana, en una floja actuación ofensiva, se encomendó a la defensa para dejar sin ideas al equipo malagueño, que dio la impresión de haber ‘pasado’ completamente del duelo, pensando más en la Final Four del próximo fin de semana que en un partido donde se jugaban sus opciones de estar presentes en el play-off por el título. Fue la peor versión del Unicaja de toda la temporada ante un Barça que se encomendó a la agresividad de Vázquez, Grimau y a ratos Ukic, para solventar un partido que no pasará a la historia de duelos electrizantes. Todo lo contrario. Con problemas en ataque en ambos equipos, prevaleció el que puso más intensidad y ese fue el Winterthur Barça, que apretó las clavijas defensivas y dejó sin ideas a los malagueños. Ni Faison, uno de los ‘verdugos’ del Barça en la Euroliga, ni Jiménez, ni Brown, aportaron apenas a su equipo, que se encomendó de nuevo a Carlos Cabezas y al voluntarioso De Miguel. Con tan poco bagaje, era difícil que pudieran sorprender al Barça, que se jugaba mucho en el envite. El partido sólo anduvo parejo en los primeros minutos, cuando un inspirado Cabezas anotó 9 de los 11 primeros puntos del Unicaja, en un primer cuarto tan raquítico en el marcador (13-11) como en juego. Con un Navarro ‘desaparecido’ en el partido -no anotó ni un solo punto, algo excepcional para el mejor anotador de la Liga ACB-, el Barça se encomendó pronto a Vázquez, Grimau y Ukic, que arrancaron el segundo cuarto con otro aire. Una mayor presión defensiva acabó pronto con la resistencia de Unicaja. El ‘culpable’ fue el gallego Vázquez. El pívot, muy motivado, prácticamente se ‘comió’ al fichaje de emergencia de los malagueños, Faverani y además, anotó 8 puntos consecutivos que lanzaron al Barça rápidamente en el electrónico (27-17). Las penetraciones de Grimau y Ukic no encontraban resistencia y los azulgranas jugaron con comodidad ante la ineficacia ofensiva del Unicaja que se quedó en unos paupérrimos 21 puntos al descanso (33-21).En la reanudación, el Barça alcanzó su máxima renta (40-21) aunque Unicaja, en sus únicos buenos minutos y gracias a un parcial de 0-8 con triples de Brown y De Miguel impidió que los de Ivanovic abrieran una brecha de escándalo y se quedara en sólo 13 puntos (51-38) a falta de un cuarto para el final.Scariolo ya no contó con los titulares en el último período, lo que permitió al Barça volver a ampliar las diferencias y jugar a placer ante un equipo muy diferente al que le eliminó de la Euroliga un par de semanas atrás. El objetivo era mantener esa tercera posición y olvidarse del Unicaja, al menos, hasta los play-off.

Winterthur Barcelona (13+20+18+17): (6), Navarro (-), De la Fuente (2), Trías (8), Marconato (7) -equipo inicial-, Fran Vázquez (18), Basile (3), Ukic (9), Grimau (11), Kakiouzis (2) y Kasun (2).

Unicaja Málaga (11+10+17+13): Cabezas (12), Jiménez (2), Brown (7), Welsch (1), De Miguel (14) -equipo inicial-, Pietrus (4), Pepe Sánchez (2), Berni Rodríguez (-), Faison (-), Faverani (7) y Vasileiadis (2).

Ovación a Kasun en su ‘rentrée’
Faltaba 1:34 para el final del partido, cuando Dusko Ivanovic dio entrada a Mario Kasun a la pista del Palau. El croata recibió la mejor ovación de la matinal al sustituir a Fran Vázquez. Los aficionados del Barça no habían visto al jugador que debía liderar este proyecto desde enero pasado. Aunque fue una ilusión corta ya que Ivanovic, en un partido donde podía haberle dado mucho más tiempo, ni le permitió romper la sudor. Aunque eso sí, el primer balón que tocó en un contraataque, acabó en canasta. La afición espera verle más.

Se esperaba con ganas al Unicaja en el Palau Blaugrana. La reciente eliminación europea a manos de los malagueños obligó al Winterthur FCB a jugar con la máxima intensidad y pundonor y su defensa maniató a un Unicaja con importantes bajas y que tendrá que mejorar para volver de Atenas con un buen resultado. Los de Scariolo aguantaron los primeros 10 minutos, bajo los impulsos de Cabezas, pero luego se desinflaron ante el poderío atrás de un Barça que contó con la versión buena de Fran Vázquez y un Roger Grimau que cumplió a la perfección ante el mal día de Navarro (cero puntos y ningún triple tras 43 partidos). Iñaki de Miguel encabezó la resistencia malagueña.